Skip to main content

Onicodistrofia lupoide simétrica

La onicodistrofia lupoide simétrica (OSL) es una enfermedad rara de las garras de los perros que provoca dolor, inflamación y fragilidad. En este artículo aprenderás qué es la SLO, cómo se diagnostica y se trata y cómo puedes ayudar a tu perro a sobrellevarla.

¿Qué es la SLO?

La SLO es una enfermedad autoinmune en la que el sistema inmunitario del perro reconoce las garras como extrañas y las ataca. Esto provoca un deterioro de la formación de la matriz de la garra, que es responsable del crecimiento y la estabilidad de las garras. Esto provoca daños en las garras, como grietas, astillas, hemorragias, infecciones y la caída de toda la garra.

La SLO suele afectar a las cuatro patas y a todas las garras por igual, de ahí el nombre de simétrica. Lupoide hace referencia a la sospecha de que la afección esté relacionada con otra enfermedad autoinmune llamada lupus. Onicodistrofia significa simplemente malformación de las garras.

¿Cómo se diagnostica la SLO?

El diagnóstico de la OSL se basa en la historia clínica, el examen clínico y la biopsia de una garra afectada. La historia clínica puede dar pistas sobre el inicio y la progresión de la enfermedad, por ejemplo cuándo aparecieron los primeros síntomas, si empeoraron o si hubo periodos de mejoría. El examen clínico puede revelar las características típicas de la OSL, como inflamación, hinchazón, enrojecimiento y costras en los lechos de las garras, así como garras deformadas o ausentes.

Sin embargo, es necesaria una biopsia para confirmar el diagnóstico y descartar otras posibles causas de daños en las garras, como infecciones fúngicas, tumores o traumatismos. Durante una biopsia, se toma una pequeña muestra de una garra y se examina al microscopio. Se pueden ver los cambios característicos en la garra, que indican una reacción autoinmune.

¿Cómo se trata la OSL?

El tratamiento de la OSL tiene por objeto reducir la inflamación, aliviar el dolor y modular el sistema inmunitario. No existe cura para la OSL, pero con una terapia adecuada puede controlarse la enfermedad y mejorar la calidad de vida del perro.

El tratamiento suele consistir en una combinación de medicación y cuidados. Los medicamentos incluyen agentes antiinflamatorios como los corticosteroides o los antiinflamatorios no esteroideos (AINE), inmunosupresores como la ciclosporina o la azatioprina, y antibióticos para las infecciones secundarias. Las medidas de cuidado incluyen el recorte regular de las garras, la limpieza y desinfección de los lechos de las garras, la aplicación de pomadas o cremas para favorecer la cicatrización y evitar traumatismos o irritaciones en las patas.

El tratamiento debe individualizarse para cada perro y puede variar en función de la gravedad y la respuesta. Algunos perros requieren un tratamiento de por vida, mientras que otros pueden interrumpirse al cabo de cierto tiempo. Es importante que el tratamiento se lleve a cabo bajo la supervisión de un veterinario y se revise periódicamente.

¿Cómo puede ayudar a su perro?

Si su perro padece SLO, puede ayudarle dándole mucho cariño y cuidados y apoyando su tratamiento. He aquí algunos consejos para hacer más fácil la vida de su perro:

  • Sea paciente y comprensivo con su perro. Sufre y puede estar ansioso o deprimido. Dedíquele mucha atención y afecto e intente no estresarle ni agobiarle.
  • Siga el plan de tratamiento que le haya sugerido su veterinario. Suministre a su perro la medicación prescrita y siga las instrucciones para el aseo de sus patas. Informe a su veterinario de cualquier cambio o efecto secundario que observe en su perro.
  • Proteja las patas de su perro de lesiones o irritaciones. Evite pasear o jugar con su perro sobre superficies ásperas o duras. Si es necesario, ponle zapatos o calcetines para proteger sus garras. Mantenga sus patas limpias y secas y córtele las uñas con regularidad.
  • Fomente la salud y el bienestar de su perro. Aliméntelo con una dieta equilibrada de alta calidad que favorezca su función inmunitaria. Proporciónele suficiente ejercicio y actividades adaptadas a su estado. Proporciónele un entorno agradable y sin estrés.

La OLP es una enfermedad grave que puede afectar a la vida de su perro. Pero con un diagnóstico precoz, un tratamiento adecuado y unos cuidados cariñosos, puede ayudar a su perro a llevar una vida feliz y sana.


Los autores parten de la base de que debe consultarse a un veterinario si un animal está enfermo y de que la medicación sólo debe tomarse tras consultar a un médico o farmacéutico. Sólo un examen individual puede conducir a un diagnóstico y a una decisión terapéutica.

Podemos ayudarle a encontrar su veterinario más cercano → Así