Antihistamínicos

¿Cuándo se deben usar los antihistamínicos?

Los antihistamínicos pueden ayudar a tu perro con varios síntomas de alergias, como por ejemplo:

• Picazón y rascado
• Urticaria e hinchazón
• Tos y estornudos
• Ojos llorosos o secreción nasal

Los antihistamínicos también pueden tener un efecto calmante, por lo que se pueden usar para aliviar la ansiedad o prevenir el mareo por movimiento cuando tu perro necesita viajar.

¿Pueden los perros tomar antihistamínicos?

Sí, los perros pueden tomar antihistamínicos, pero siempre debes hablar primero con tu veterinario. Aunque la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. (FDA) no ha aprobado los antihistamínicos para perros, son seguros en la dosis correcta y son comúnmente prescritos por los veterinarios para tratar alergias de la piel que causan picazón y rascado.

Tu veterinario puede aconsejarte sobre qué antihistamínico es mejor para tu perro y con qué frecuencia deberías administrarlo. También te puede informar si debes evitar los antihistamínicos si tu perro tiene ciertas condiciones de salud o si está embarazada o podría estarlo. Además, puede examinar a tu perro para determinar qué está causando sus síntomas.

Los antihistamínicos pueden ser peligrosos para tu perro si se administran en exceso. Una sobredosis de antihistamínicos puede causar convulsiones y otros efectos secundarios. La forma más segura de administrar antihistamínicos es dosificar según el peso de tu perro.

¿Qué tipos de antihistamínicos existen?

Hay dos generaciones de antihistamínicos:

• Primera generación: Fueron los primeros en ser aprobados por la FDA y se usan desde la década de 1930 en los EE. UU. Actúan sobre los receptores de histamina en el cerebro, la médula espinal y otros receptores. Una característica notable de esta generación de antihistamínicos es su capacidad para cruzar la barrera hematoencefálica, lo que provoca somnolencia.
• Segunda generación: Fueron aprobados en la década de 1980 por la FDA y tienen menos efectos secundarios que los de primera generación. Actúan principalmente sobre los receptores de histamina en la periferia y no cruzan tan fácilmente la barrera hematoencefálica.

Aquí hay algunos de los antihistamínicos más comúnmente usados para tratar alergias en perros:

• Diphenhydramine (Benadryl, Sentry, PetArmor)
• Cetirizina (Zyrtec)
• Loratadina (Claritin, Alavert)
• Fexofenadina (Allegra)

¿Qué generación de antihistamínicos es mejor para los perros?

No hay una respuesta definitiva sobre qué generación de antihistamínicos es mejor para los perros. Depende de varios factores, como la gravedad de los síntomas de la alergia, el motivo del uso de antihistamínicos y la respuesta individual del perro al medicamento.

En general, los antihistamínicos de primera generación pueden ser más efectivos para reducir el picor y el rascado, pero también pueden causar más somnolencia. Los antihistamínicos de segunda generación pueden causar menos somnolencia, pero pueden ser menos efectivos para reducir el picor y el rascado.

¿Cuáles son los beneficios de los antihistamínicos para los perros?

Los antihistamínicos pueden ofrecer varios beneficios para tu perro, como:

• Aliviar los síntomas de alergia que causan incomodidad a tu perro.
• Reducir la inflamación y la irritación de la piel causadas por alergias.
• Mejorar la calidad de vida y el bienestar de tu perro.
• Prevenir complicaciones causadas por el rascado o lamido excesivo, como infecciones de la piel o puntos calientes.
• Reducir la ansiedad o el mareo por movimiento cuando tu perro está estresado o nervioso.

¿Cuáles son los efectos secundarios de los antihistamínicos para los perros?

Aunque generalmente son seguros para los perros cuando se administran en la dosis correcta, los antihistamínicos pueden tener algunos efectos secundarios, como:

• Somnolencia o sedación.
• Boca seca o aumento de la sed.
• Pérdida de apetito o náuseas.
• Vómitos o diarrea.
• Confusión o inquietud.
• Taquicardia o hipotensión.

Los efectos secundarios pueden variar según el antihistamínico utilizado y el perro individual. Si observas que tu perro muestra síntomas inusuales o se comporta de manera diferente después de tomar un antihistamínico, debes contactar a tu veterinario de inmediato.

¿Cómo elegir el mejor antihistamínico para tu perro?

No existe un antihistamínico universal que sea el mejor para todos los perros. La elección del mejor antihistamínico para tu perro dependerá de varios factores, como el tipo de alergia que tiene, la gravedad de los síntomas que muestra, la reacción individual de tu perro al medicamento y la disponibilidad y el costo del medicamento.

La mejor manera de elegir el antihistamínico adecuado para tu perro es hablar con tu veterinario. Tu veterinario puede hacerte una recomendación basada en un examen completo de tu perro y su historial médico. Tu veterinario también puede indicarte cómo dosificar y administrar correctamente el antihistamínico y cómo monitorear los posibles efectos secundarios.

¿Existen alternativas naturales a los antihistamínicos para perros?

Sí, hay algunas alternativas naturales a los antihistamínicos para perros que pueden ayudar a aliviar o prevenir los síntomas de alergia. Sin embargo, estas no están tan bien investigadas o probadas como los antihistamínicos sintéticos y también pueden tener efectos secundarios o interacciones. Siempre debes hablar con tu veterinario antes de darle algo nuevo a tu perro.

Algunas alternativas naturales a los antihistamínicos para perros incluyen:

• Quercetina: Un bioflavonoide que se encuentra en frutas y verduras, tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Puede ayudar a reducir la liberación de histaminas y modular la respuesta inmunitaria.
• Ácidos grasos omega-3: Contenidos en el aceite de pescado, pueden ayudar a reducir la inflamación y apoyar la salud de la piel. También pueden aliviar el picor y mejorar el brillo del pelaje.