Alimentación tóxica
Si un ingrediente de la dieta de un perro lleva la etiqueta "tóxico para la alimentación", significa que ese ingrediente concreto es tóxico o perjudicial para su perro y no debe dársele. Hay ciertos alimentos y sustancias que pueden ser inocuos para los humanos pero tóxicos para los perros.
Algunos ejemplos comunes de alimentos tóxicos para los perros son el chocolate, el xilitol (un edulcorante presente en muchos productos sin azúcar), las uvas y las pasas sultanas, las cebollas, el ajo y algunos tipos de frutos secos. Algunas plantas y medicamentos también pueden ser tóxicos para los perros.
Cuando un perro ingiere una sustancia tóxica, los síntomas pueden variar según el tipo de sustancia y la cantidad ingerida. Pueden ir desde una indigestión leve hasta problemas de salud graves, como insuficiencia renal o trastornos neurológicos.
Si sospecha que su perro ha ingerido algo venenoso, es importante que acuda inmediatamente al veterinario. Conserve el envase o una muestra de la sustancia en cuestión para ayudar al veterinario a diagnosticarla y tratarla.
Para evitar estos peligros, es importante informarse sobre los alimentos seguros e inseguros para perros y prestar atención a lo que come el perro. Asegúrate de mantener fuera de su alcance los alimentos tóxicos para los perros.